Nos hemos enfrentado a diferentes retos, muchísimos. Pero creo que uno de los más grandes fue aquel día cuando el transporte del novio lo dejó plantado y nosotros tuvimos que hacerla de conductor, controlar los nervios fue algo muy difícil ya que nosotros siempre tenemos que estar antes del protocolo religioso ya que hacemos levantamiento de cada uno de los acontecimientos que suceden antes de que inicie, así como pruebas de audio, color, organización para cubrir la entrada de los novios así que tuvimos que controlarnos para cubrir todo antes de que nos ganara el miedo. Algo que nos caracteriza mucho como equipo es que a pesar de estar bajo estrés, manejamos este tipo de situaciones con liderazgo.